Silvio Rodríguez

El extraño caso de las damas África


Imprimir canciónEnviar corrección de la canciónEnviar canción nuevafacebooktwitterwhatsapp

El otro día fuimos al parque
a ver la galería de arte
y cuando terminó la mañana
pasamos a comprar africanas.
Cargué con un cartucho
contento para casa
y lo guardé en el frío
porque el calor abrasa
¡Y vaya usted a saber lo que pasa!

Anoche tuve una visita:
un matrimonio y su vejiguita.
Y como era ocasión apropiada
quise brindarles mis africanas.
Cuando encontré la bolsa
después de buscar mucho,
la sacudí en mi oído
diciendo: "Nada escucho".
¡Adentro hallé no más que cartucho!

¿Quién se comió, quién se comió,
quién se comió mi africana?


Si no fue Juana,
ni fue su hermana,
que alguien me diga quién se ha comido mis africanas.

Es concebible,
y muy posible,
que yo sujete mis africanas con imperdibles.

Una pepilla,
le hacía cosquillas
interrogando sádicamente a la giraldilla.

Señor abate,
no se arrebate
si usted encuentra tanta ricura de chocolate.


Autor(es): Silvio Rodríguez