Los Tres Angelitos
El Niño Dios es tan pobre
que no tiene ni cunita.
Tres angelitos del cielo
la van a hacer con pajitas.
El moreno pone una,
el rubio pone tres
y el más chico se tropieza,
pues trae lo menos seis.
Ponen y ponen
y vuelven a poner,
y ya tiene su cunita
el Niño de Belén.
(Ponen y ponen
y vuelven a poner,
y ya tiene su cunita
el Niño de Belén.)
El Rey Melchor ha ofrecido
zapatos de oro al infante,
Gaspar los saca de perlas
y Baltasar de diamantes.
Pero mira cómo ríe
travieso San Gabriel,
porque sabe la medida
del piececito aquel.
Calzan y calzan,
y sólo calzan bien
unos que con dos almendras
le ha hecho San José.
(Calzan y calzan,
y sólo calzan bien
unos que con dos almendras
le ha hecho San José.)
Cantan pastores y reyes
gloria al Niño que ha nacido,
la Virgen lo está meciendo
y va a quedarse dormido.
De puntillas se colocan
un ángel de guardián,
y los otros dos le arrullan
con gracia celestial.
Duerme, mi Niño,
mi Niño, duerme ya.
En el cielo está la luna
y el sol en el portal.
(Duerme, mi Niño,
mi Niño, duerme ya.
En el cielo está la luna
y el sol en el portal.)
Duerme, mi Niño,
mi Niño, duerme ya.
En el cielo está la luna
y el sol en el portal.
(Duerme, mi Niño,
mi Niño, duerme ya.
En el cielo está la luna
y el sol en el portal.)
Y el sol en el portal.
(Y el sol en el portal.)